sábado, 13 de diciembre de 2008

La poca clase del RCR de Huelva SAD, un equipo de 1ª División

Dando un paseo por la web, me encuentro en el blog de mi amigo Manolo Salazar, con la siguiente noticia:

El Consejo de Administración del Recreativo de Huelva, ha tenido a bien declarar el partido del domingo ante Osasuna como homenaje a los clubes del fútbol base de Huelva y provincia que son originarios de los jugadores que integran los escalafones inferiores de la entidad.

A modo de agradecimiento, el Decano ha cursado invitación para jugadores y monitores de los siguientes clubes:


- AD.LOS ROSALES
- CD.VERDELUZ
- ALMONTE BALOMPIE
- ATLETICO THARSIS
- TRIGUEROS BALOMPIE
- C.D.VALVERDEÑO
- EFB.BONARES
- EFB.MANUEL MACARIO
- AD.CARTAYA
- EFB.NERVA
- ATLÉTICO COLÓN
- EFB.LUCENA DEL PUERTO
- PMD.PUNTA UMBRIA
- CD.NUEVO MOLINO
- CD.2001 EFB
- CD.PÉREZ CUBILLAS
- AD.SANTA MARTA
- EFB.A.ROMERO PANCHO
- SALESIANOS

Mi pregunta es la siguiente, ¿dónde está el CCD Siempre Alegres?.



Os recuerdo que en la actual campaña se encuentra jugando en el División de Honor del Recreativo de Huelva, el palmerino Pablo Millán. ¿O es que acaso Pablo Millán tiene que ocultar su procedencia para no caer mal en el Recre?.
Además, en las últimas campañas, el CCD Siempre Alegres ha proporcionado varios jugadores de su cantera al Recreativo; Marroco, Antonio Roldán, e incluso Pablo Bernal, ahora en las filas del Recre "B", y que se formó en la escuela de fútbol Base de La Palma.



Sinceramente, es repugnante. Y como lo es y son poca la gente (por no decir ninguna) que lo va a denunciar públicamente, pues yo lo hago. Y lo hago en mayúsculas, REPUGNANTE.

Dicen aficionados del San Juan, Iliplense y el propio Recreativo de Huelva, que es de vergüenza que los ciudadanos de La Palma del Condado, sean del Real Betis o Sevilla FC, y no del Recreativo que debe ser su equipo.

De vergüenza me parece a mí la actitud que tienen los dirigentes del Decano del fútbol español. Que deberían tener más conciencia del club al que representan y dar un poco de ejemplo, al menos con los clubes de su provincia.

Ellos mismos se tienen ganados a pulso, la antipatía de los pueblos onubenses (quitando a unos cuantos). Y si se trata del trato a los que formamos parte de La Palma del Condado, y más concretamente a La Palma CF y CCD Siempre Alegres, es de vergüenza.



Estamos cansados de recibir insultos cada vez que nuestros chavales acuden a la capital representando el escudo del CCD Siempre Alegres.
Cansados de recibir continuos desprecios, como que vivimos en la primera edición del Trofeo de nuestro presidente honorífico, Juan José Alfaro Pérez. Cuando Lucas Alcaraz y los suyos (dirigentes incluidos), nos dejaron tirados con su marcha en el descanso, para dejar en el césped como monigotes a los jugadores del filial. Entonces dirigidos por el actual entrenador del Ayamonte CF, Manuel Juan Limón (grandísima persona y mejor entrenador, que conste).

Lo que va a ocurrir este fin de semana en el estadio Nuevo Colombino, no es más que un nuevo desprecio a dos entidades con mucho peso como La Palma CF y CCD Siempre Alegres.

Porque, ¿cómo se puede tapar y ocultar a la que con mucha diferencia puede ser una de las mejores canteras de la provincia?. Yo no sé a ustedes, pero es que a mi no me entra en la cabeza.



Por eso os digo a ustedes, a los que tanto criticáis a los ciudadanos de La Palma del Condado, que nos sigáis llamando sevillanos. Al menos a mi, esa palabra me resulta como un elogio que me llena de orgullo. No sabéis cuando.

Y podéis seguir llamándonos sevillanos, porque nosotros, los ciudadanos de La Palma del Condado (en un altísimo porcentaje), seguiremos siendo del Real Betis o Sevilla FC, y por supuesto seguiremos asistiendo a la capital de Andalucía para realizar nuestras compras de Navidad.



Viva La Palma CF y el Sevilla FC!!

1 comentario:

aparcalamoto dijo...

¿¿¿ te has informado bien ???

Fíjate, que sólo están la mitad de las escuelas de futbol de la provincia... la otra mitad irá a otro encuentro.
Faltan: Lepe, Moguer, La Palma, Aracena, etc, etc...

Todos a la vez no caben