Qué maravilloso está siendo todo. ¿Quién no se ha levantado hoy con un cosquilleo en el estómago? ¿Quién no ha pensado nada más amanecer en el partido de esta noche?...
El día de hoy quedará marcado en nuestro recuerdo para siempre. Tendremos el honor de contar a nuestros hijos y nietos, que vivimos una final de España en la Copa del Mundo y la ganamos. Ojalá sea así. Nadie, absolutamente nadie, ha vivido lo que nosotros estamos viviendo ahora con el fútbol español. Cuántas personas hubiesen deseado estar presentes en el día de hoy para festejar esta gran final que ha unido al país. A los políticos. A los clubes deportivos. A las asociaciones enfrentadas. A las familias… Todos unidos con una misma ilusión; Ver a Iker Casillas levantar esta noche la Copa del Mundo.
Tengo grandes sensaciones acerca del partido. Si analizamos a Holanda y España, el combinado español es superior en todas las líneas. Muy superior. Infinitamente superior. Pero habrá que jugar a un alto nivel y mantener nuestra identidad para doblegar a una Selección Holandesa que espera hacerse con el campeonato en su tercera final.
Esperemos que no sea así y que el Pulpo Paul se salga con la suya.
Todo parece indicar que Vicente del Bosque repetirá el mismo once inicial que doblegó a Alemania, bajo el mayor baño de fútbol que yo recuerdo en mis 24 años de vida. Con Pedro en el campo ganamos en profundidad y velocidad, lo que beneficia el fútbol que fabricamos bajo la dirección de Xavi, Alonso e Iniesta.
El día será largo, y esperemos que la noche también, porque eso significará que nuestro país se habrá coronado como Rey del Mundo.
¡¡Mucha suerte España y a por ellos!!
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