Es difícil mantener la calma en un momento tan delicado como el que está viviendo el CD Mairena, aquejado de una crisis institucional severa.
Y es que la situación de paro en todos los aspectos que vive el club sevillano amenaza con perjudicar seriamente a un equipo que hace nada peleaba por ascender a la Categoría de Bronce.
La junta gestora es inevitable después de que el viernes Francisco Sánchez, hasta entonces presidente, renunciase.
La medida excepcional se aprobará esta noche en una nueva asamblea extraordinaria que tendrá lugar a las 21:00 h en primera convocatoria y a las 21:30 h en segunda en el Nuevo Estadio San Bartolomé.
Desde la directiva actual se llama encarecidamente a la participación de los socios, pues es el futuro de la institución el que está en juego más que nunca.
Al mismo tiempo, se anunciará el calendario electoral, cuyo plazo para la presentación de candidaturas constará de unos quince días. La junta gestora estará estatutariamente respaldada para dar pasos en materia deportiva. Por ello, a partir del martes se podrían producir llamadas, primero, para concretar el fichaje del entrenador o la renovación de Eusebio Navarro.
No obstante, el actual secretario, Antonio Guerra, habla de la relevancia que cobra la cita de mañana: "Es una reunión importante, ya que se puede dar una situación de grave vacío de poder. La junta gestora se mantendrá vigente hasta el nombramiento de un nuevo presidente". "Es deseable que haya muchos socios, pues, sin ellos, podría no nombrarse ni la junta gestora (la cual necesita a un mínimo de cinco de ellos)", enuncia el propio secretario del club, que insiste en que ni él ni el vicepresidente, Antonio Morales, formarán parte de la misma. "Estamos agotados tanto anímicamente como en cuanto a recursos. Queremos que haya otra gente al frente", admite Guerra.
Los guiños hacia Juan Moreno, ex presidente, en el municipio son constantes.
Informa: Estadio Deportivo
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