Cierto que anoche Juande Ramos se equivocó en la alineación, sacando sólo a un hombre en la delantera, pero, ¿sólo falló Juande?. Creo que fallaron muchos más!!
Daniel Alves, no es el mismo. Ayer perdió una infinidad de balones, fue incapaz de doblegar la banda tantas veces como antes lo hacía, y además pienso que el brazalete de capitán le viene grande a este futbolista que después de lo ocurrido este verano debería ganarse de nuevo al sevillismo y después ya hablaríamos de brazalete, pero desde luego así no.
En el equipo no existe la misma unión. El por qué no lo sé, pero ayer vi cosas en el campo que no me gustaron.
La laguna en la zona de creación era impresionante y ahí el Espanyol pudo hacer mucho más daño si Ernesto Valverde y su equipo hubieran estado más inteligente.
Y después bajo mi opinión los Biris se equivocaron cantando con insultos a una afición bética que ha estado al lado de nosotros en los momentos difíciles. Que pronto se olvidan las cosas!!.
Creo que ese no es el camino que han iniciado de la mano Del Nido y Lopera. Ni tampoco lo que Puerta quería, pero bueno, cada uno sabrá lo que tiene que hacer.
Después del partido de anoche, me queda aún más claro que el fútbol es resultado y que la memoria es muy corta cuando los resultados no acompañan.
Anoche mucha gente quería largar a Juande y de repente el Sevilla FC ya es muy malo porque ha perdido tres partidos consecutivos, ¿ya no se acuerdan como ganó la liga el Real Madrid la temporada pasada?, ¿ya se han olvidado los cinco títulos conseguidos por esta misma plantilla, misma directiva y mismo cuerpo técnico en sólo catorce meses?. Ya dije ayer que la afición se ha acostumbrado al triunfo y eso no es bueno.
Esto sólo es un bache y vamos a salir de él, aunque para eso es imprescindible el apoyo de una afición que tiene que estar más cerca que nunca del futbolista y del cuerpo técnico.
Centrándonos en el encuentro al Espanyol anoche le tocó la lotería. Aunque primero hay que destacar el gran gesto realizado antes de que comenzara a rodar el balón.
Los periquitos ofrecieron un ramo de flores a Antonio Puerta, colocándolo en el mismo lugar donde el jugador se desplomó hacía anoche justamente un mes.
En el partido los jugadores de Ernesto Valverde tuvieron un 100% de efectividad ya que tiró tres veces a portería y metió tres goles. Pero la clave además de eso estuvo en Kameni. El portero periquito es una caja de bombas, lo mismo te hace un partidazo que te las canta todas, y anoche desafortunadamente para el Sevilla le tocó el día bueno, luciéndose y salvando tres puntos para su equipo.
Otras de las claves del partido estuvo en el minuto cinco. Kerzhakov falló en el uno a uno con Kameni y mando fuera un balón que podía haber cambiado el ritmo del encuentro.
El Espanyol hizo lo suyo, replegado atrás siempre buscaba matar a la contra con un Luis García que esta en racha. Y así fue en la recta final del primer periodo el artillero blanquiazul puso por delante a su equipo.
Tras el tanto del Espanyol, Juande mandó a calentar a Diego Capel, Kone y Martí.
Tras el descanso entraron en escena el canterano y el marfileño, cambiando por completo el signo del encuentro.
El Sevilla pudo machacar en el inicio del segundo periodo con ocasiones que antes se metían y ahora no, (otro de los grandes problemas). Kerzhakov falló sólo en la línea de gol y a puerta vacía. Kameni sacó a Navas un balón que iba a la escuadra......
Y mientras si y mientras no, el Espanyol montaba una nueva contra para anotar el 0-2 en su segunda ocasión, de nuevo el protagonista Luis García. Impresionante.
Fue entonces cuando la afición rugió más fuerte que nunca y el Sevilla metió la quinta y apretó el acelerador a fondo. Juande dio entrada en el campo al que debió salir desde el inicio Federic Kanouté, y con la triple “K” en el campo (Kerzhakov, Kone y Kanouté) los de Nervión iban a machacar a los periquitos.
El 1-2 llegaba en la banda derecha. Un centro raso de Navas lo introdujo es su propia red el capitán visitante.
El Sevilla se enganchaba de nuevo al encuentro, y la afición apretaba de lo lindo.
Kone se marcó dos jugadones de setenta metros, dejando claro del por qué es el futbolista más caro de la historia sevillista. Éste jugador es una máquina y completó su magnífica noche con un remate de cabeza que se coló por la escuadra derecha de Kameni, consiguiendo el rubio de piel morena empatar el encuentro y anotar su primer gol con la elástica sevillista.
Con el 2-2 todo el mundo creía que al Espanyol le caerían al menos dos goles más, pero ni mucho menos, el Sevilla bajo nuevamente el nivel del juego, además al equipo no se le vio bien físicamente, ya que algunos jugadores terminaron arrastrándose por el campo.
Se pudo machacar con nuevas ocasiones clarísimas de gol, no lo hicimos, y en una nueva contra, el equipo de Valverde sentenciaba el choque con el 2-3. obra del recién ingresado en el campo, Raúl Tamudo.
El estadio enmudeció y los aficionados comenzaron a desfilar de sus asientos ya que el Sevilla caía por tercer partido consecutivo.
A todos se nos quedó cara de tontos, ya que el Sevilla realizó lo más difícil que era empatar el encuentro, pero esto es fútbol y los errores a veces se pagan muy caros.
Ayer se cometieron demasiados errores y claro está que lo pagamos a pesar de ser el Sevilla de siempre en gran parte de la segunda mitad.
Ahora hay que olvidar todo esto y centrarnos en el siguiente partido que nos llevará hasta La Romareda. No será un encuentro fácil aunque creo que está más que demostrado que el Sevilla FC es un equipo capaz de vencer a cualquiera que se ponga por delante.
Ánimo Sevilla, ánimo campeón!!
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